miércoles, octubre 08, 2008






















Farabundo,
Sandino, Caamaño, Che:
Anti-imperialistas, comunistas e incorruptibles

SEREMOS COMO ELLOS!!!!!!!!!

Hoy 9 de Octubre, se cumplen 41 años del fusilamiento del guerrillero heroico.
Mas que un dia enlutado hoy es un dia reflexivo.





Les dejo este poema del 2003.

SILENCIO

La oscura fatalidad no va de pasada
sin lugar a dudas hoy sera otro dia de esos

El amarillo girasol mendiga a gritos el sol

Cada crujir de la cansada madera
que envuelve mis huesos
en otro tiempo te pertenecio

Tu voz de relampago cae desde la altura

Los abismos alcanzan profundidades eternas

Todo el asombro que desearia cantar
lo llevas dentro

Toda la sangre que de mis venas brota
algun CC extraviado es para ti

Eres dueño de la cruz
que cargo todos los dias

Los que nada tienen guardaran silencio esta noche
ni una sola bala perforara corazones
intacto
fuiste
y andas los montes

Encenderemos con lagrimas los velones en las calles
desesperanza
y una por una las puertas se abriran
al pasar la caravana

Y CUANDO TUS CENIZAS ALCANCEN LA DIMENSION
EN DONDE GUARDAMOS TU MUERTE
LEVANTAREMOS LOS BRAZOS PARA SIEMPRE



viernes, octubre 03, 2008















Los verdaderos heroes, tienen las estrellas en la frente no en los hombros
Amaury German Aristy



Como es posible?

Como es posible que el gobierno de la Republica Bolivariana de Venezuela done 100 viviendas para ser entregadas a familias damnificadas por la Tormenta Noel, y que la reparticion de esas unidades no se haga de manera transparente? Y peor aun, que la estatura gigante de Caamaño se utilice para engañar al pueblo.

Hasta cuando grupos sin respaldo popular van a seguir explotando la figura de nuestros heroes para promover sus aspiraciones politicas?

Les dejo este poema de Dardo Dorronzoro, poeta argentino desaparecido por la dictadura militar que se instalo en Argentina a partir de 1976. Lo inserto aqui como homenaje a todos los hombres que entregaron su sangre por la dignidad y el decoro de nuestro pueblo, y especialmente a Francisco Alberto Caamaño, el mas grande todos nuestros militares, quien fuera nuestra luz mas brillante cuando la noche estuvo mas oscura.


MIENTRAS ME MATAN

Comenzaron a matarme de a uno hace muchos siglos,
después de a setenta, después de a quinientos,
hay que ver cómo me matan ahora de a miles en cada esquina,
en cada feriado,
cómo fabrican sueldos y galones con los huesos que me quedan,
cómo fabrican calabozos para poner algún rincón de mis pantalones,
y cómo se turnan entre gordo y gordo para
ver de qué ojo muero primero,
pero resulta
que cada vez soy más uno de los otros,
uno de los que nacen y renacen y vuelven a nacer entre los fuegos,
que cada vez tengo más luz, más pájaros, más flores en la puntería,
que cada vez
me soporto más elegantemente entre los fierros y los veranos,
y hay veces que me pregunto -me digo para mí- si ellos
no harían mejor en cambiar de uñas y de cuentas,
de andar de peldaño en peldaño hacia abajo de las luces,
o en comprarse una sangre nueva, una sangre más limpia
para usar en feriados y domingos.


sábado, septiembre 20, 2008

Los dos 11 de Septiembre. Aporte al blog de Zafarrancho

Dos 11 de septiembres recuerdo en la historia: el 1ro, el del funesto día en que el gobierno legítimamente elegido por el pueblo de Chile fue depuesto por militares, oligarquía, transnacionales y el poder imperial de los EEUU. El 2do 11 de Septiembre que recuerdo es el que todos conocen, el del ataque aéreo simultaneo a edificios en los Estados Unidos.

La gran mayoría del mundo solo conoce este último.

No pienso decir que uno fue bueno y el otro malo, no. Nadie quiere tener la incertidumbre permanente en su territorio, de la posibilidad de un ataque terrorista que no respeta la vida de nadie.


Me refiero a lo que es la promoción y el poder de la misma para imponer las ideas.

Parecería que las únicas vidas que valen son las norteamericanas y que todo lo demás que muere bajo la pólvora asesina son animales u otra especie inferior. Como dicen en sus películas (principal medio de propaganda) cuando están en peligro: soy americano y con eso ya se creen libres de peligro.

Parece que la vida del millón de iraquies que han muerto en la guerra preventiva de Irak (la guerra por sí acaso) no vale, pero si se protesta y se conoce bien el numero de estadounidenses muertos.

Parece que los 3 millones de Palestinos que viven en campos de refugiados en el sur del Líbano, empujados de sus tierras ancestrales, no vale nada.

Las más de 4 millones de personas muertas en las absurdas guerras del sudeste asiático valen mucho menos que las 50,000 estadounidenses.

Las atrocidades de la “Operación Cóndor”, la limpieza en el cono sur de militantes de izquierda, las caravanas de la muerte, las contras en Centro América, los 100,000 muertos en Corea del Sur por creencias políticas, y un largo etc… Cuantas películas esperan poder ser rodadas para que ese inmenso pueblo tan grande y tan ignorante de la historia y las noticias fuera de sus fronteras, conozca el sufrir de esta especie que vive debajo del Río Grande, y que son provocadas directamente por los gobiernos que ellos eligen.

Como es posible que un criminal de guerra como George Bush haya sido reelegido? Es indignante pensar en ello.

En el día de ayer mientras escuchaba en la TV la entrevista que le hiciera Larry King a Ingrid Betancourt, ex candidata presidencial colombiana, y quien estuvo 7 años secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia; leo en el periódico que mientras se celebraba una boda en Afganistán las bombas MADE IN EEUU asesinaban a una multitud, entre ellos 39 niños y que los soldados lo niegan.

Acaso no es esto un tema interesante para hacer una película, una entrevista, o salir en la primera plana de un periódico? Acaso esos muertos no merecen que los comentaristas cubran su noticia?

Por eso creo que los 11 de septiembre son un ejemplo para demostrar el poder de los medios y la influencia que tienen en el pensamiento de la gente, en su accionar, en sus prioridades y en el voto de esta manipulada democracia. La democracia de los menos y del poder.

viernes, agosto 01, 2008

No nos basta
















No nos basta un no basta Roman
aunque destrozen mil veces tu cabeza
no nos bastara

Aunque nos sequen los mares
no podran ponernos de rodillas

Tu ejemplo nos guia

Tu lucha nos impregna Comandante
tu sacrificio como brujula nos sigue
otro dia
otro mes
otro año

Nunca podran arrancarnos la montaña
del semblante y de la sangre

Seguiremos tu lucha para siempre

miércoles, julio 02, 2008

Ningun derecho....gracias Comandante Fidel

"No tenemos derecho a olvidar a Francisco Caamaño, joven militar dominicano que durante meses combatio heroicamente contra 40,000 soldados de Estados Unidos que el Presidente Johnson hizo desembarcar en Republica Dominicana en el año 1965 para impedir el regreso del Presidente constitucional Juan Bosch.

Su tenaz resistencia al frente de un puñado de militares y civiles, que duro meses, constituye uno de los episodios revolucionarios mas gloriosos que se han escrito en este hemisferio. Caamaño, despues de una tregua que arranco al imperio, volvio a su patria y entrego su vida por la liberacion de su pueblo"

Extraido de Cien horas con Fidel, conversaciones con Ignacio Ramonet. Hablando de militares progresistas y honorables.

Francis luchó denodadamente, predicando con el ejemplo

Yo tuve un hermano....

HAMLET HERMANN


Francis habría cumplido 76 años el pasado miércoles 11 de junio. También cumplió 43 años de haber adquirido la conciencia social necesaria y suficiente para defender la dignidad nacional contra la soldadesca invasora.

Forjó entonces una imagen patriótica ante el mundo que, incluso, creció ante la mirada del feroz enemigo imperial. Lo logró porque se atrevió a encabezar un movimiento popular par enfrentar directamente a las tropas estadounidenses. Como nunca antes se había conocido en el continente americano. Luchó denodadamente, predicando con el ejemplo, sin buscar excusas para sus errores.

Ernesto habría cumplido 80 años el sábado pasado. Ocho décadas de aquel casual nacimiento en Rosario, Argentina, y también 52 años de haberse apretujado en el yate "Granma" para trocar su profesión de médico por la de internacionalista. Su imagen ejemplar desbordó todos los límites imaginables. Se convirtió en ejemplo digno de lo que es el desprendimiento de las cosas para que predominaran las ideas. Muchos pudieron considerarlo un aventurero. Y admitió que lo era, sólo que de un tipo diferente: de aquellos que exponen el pellejo para demostrar sus verdades.

Veo a Francis, allá por el Londres de 1967, luchando contra la soledad prefabricada por otros y enfrentando el acoso constante del invasor. Sin dar su brazo a torcer. Y lo imagino como si en la capital del Albión pensara en su futuro, que era el de Ernesto, y entonces recitara de memoria a Julio Cortázar cuando decía:

"Yo tuve un hermano/ No nos vimos nunca, pero no importaba./"

"Yo tuve un hermano que iba por los montes mientras yo dormía/"

"Lo quise a mi modo/ Le tomé su voz, libre como el agua/"

"Caminé de a ratos cerca de su sombra/ No nos vimos nunca, pero no importaba/"

"Mi hermano despierto mientras yo dormía/ Mi hermano mostrándome, detrás de la noche, su estrella elegida."

Resulta imposible pensar en Francis sin imaginar a Ernesto, y muchos deben sentir extremada vergüenza por haberlos negado. La renuncia total a las cosas gracias al predominio de las ideas era algo que uno había aprendido del otro, aunque no se vieran nunca. Pero no importaba.

Resultaba harto difícil, sino imposible, alejar a Francis como a Ernesto de los lugares donde hubiera más peligro. La audacia demostrada ponía a pensar que ellos habían nacido para semilla. Sin embargo, por un castigo social o por un designio divino, uno y otro murieron solos, sin compañero alguno a su alrededor. Como si la soledad fuera un sino inapelable que mostraba cuán convencidos estaban del camino que habían tomado para beneficio de los demás.

Ahora, cuando los enemigos del progreso social creen haber ganado la batalla, resulta que el recuerdo de Francis y de Ernesto se ha desparramado por el mundo mostrando sus ejemplos y sus virtudes. Frecuentemente se afirma que la época de Ernesto y de Francis ya no es la nuestra. Pero la miseria y la explotación que los empujaron a la acción persisten bajo el mismo sistema. Porque el cruel sistema recrea las crisis y los sufrimientos de las mayorías populares para beneficio de unos pocos.

Ernesto fue asesinado en La Higuera , en Bolivia, en el corazón mismo de Nuestra América. Francis fue asesinado en la loma Cuero de Puerco, en el corazón mismo de la cordillera central dominicana y sus restos lanzados al mar Caribe. Uno y otro crecen y se reproducen con el tiempo. Y vemos expandirse sus legados y confirmarse sus verdades, aquellas que gritaban de viva voz y que algunos de sus compañeros no quisieron escuchar. De ahí la validez eterna del poema de Cortázar cada vez que pensemos en Francis y en Ernesto.

"Yo tuve un hermano/ No nos vimos nunca, pero no importaba./"

"Yo tuve un hermano que iba por los montes mientras yo dormía/"

"Lo quise a mi modo/ Le tomé su voz, libre como el agua/"

"Caminé de a ratos cerca de su sombra/ No nos vimos nunca, pero no importaba/"

"Mi hermano despierto mientras yo dormía/ Mi hermano mostrándome, detrás de la noche, su estrella elegida."

Como debe ser.



http://www.hoy.com.do/opiniones/2008/6/15/93575/Yo-tuve-un-hermano


martes, junio 10, 2008

ALFA Y OMEGA. Aporte al blog de mi amigo ZaFarrancho


Qué destino el suyo, un héroe de su talla y de su temple,
un gigante para todos los tiempos, no merecía tan
despreciables contendores, tan bajos, tan miserables, tan cobardes…

Fragmento de HOMENAJE, de Juvencio Valle

Aquella noche apague la luz de la lámpara de la sala al leer las últimas líneas del libro El Fiero del autor Hamlet Hermann y la casa quedo a oscuras, pensé entonces que dicha oscuridad sería el capitulo siguiente de aquel libro del cual me despedía con pesar. Oscuridad posterior que reinó en la Rep. Dom. luego de la muerte de Caamaño.

Sentía que al colocar el libro en la mesa, colocaba mí fusil, para descansar luego de la faena.

Los diez años más intensos y más sangrientos, que ha tenido nuestro país, fueron narrados por el autor, con la mayor neutralidad que se puede permitir una persona que a la vez vivió los hechos narrados, con un sentido de autocrítica encomiable, sin pretender poner a nuestros héroes en un pedestal inalcanzable.

Aunque somos apasionados y conocedores de la historia de estos años, obtuvimos nuevos datos, que nos muestran la bajeza del enemigo que teníamos por delante.

En 1965 cuando Caamaño llegó al Palacio para deponer a los golpistas del régimen constitucional de Bosch y con el objetivo de la vuelta de este en lo inmediato, el trato dado a los triunviros fue distinto. Caamaño les informó que sus vidas serían respetadas.

Cuando los constitucionalistas tomaron a los prisioneros yanquis mientras estos entorpecían el futuro único de porvenir, y asesinaban y maltrataban al pueblo, sus vidas fueron respetadas.

Manolo Tavarez y Francisco A. Caamaño dos grandes dominicanos que fueron el Alfa y Omega de aquellos 10 Años (1963-1973), no fueron correspondidos con el mismo trato demostrando que se enfrentaban a un enemigo cobarde y asesino: Balaguer y sus generales, los golpistas de 1963, y los yanquis, sus amos.

martes, mayo 27, 2008

Articulo publicado en el Periodico Hoy. De Hamlet Herman

Caamaño: un fantasma esperado y temido


HAMLET HERMANN

Narra el coronel® Brian J. Bosch en su libro “Balaguer y los Militares Dominicanos” que para la jefatura militar del gobierno, el asunto Caamaño era el problema más serio.

La posibilidad de un resurgimiento del líder de la lucha contra la intervención estadounidense a República Dominicana en 1965, especialmente si fuera al frente de un grupo armado, era calificada como la mayor amenaza para los intereses de las instituciones militares.

Debido a esta gran preocupación, los asesores militares estadounidenses del MAAG se dieron a la tarea de formar dos agrupaciones militares con fuerza de Batallón ubicados fuera de la capital dominicana. Trataban así de romper la formación “constabulary”[1] que desde los tiempos de la ocupación militar de Estados Unidos entre 1916 y 1924 se había establecido en República Dominicana.

A finales de 1972, el Noveno Batallón fue estacionado en la población de Mao, en el Noroeste dominicano, con capacidad de fuego y de maniobra que podía ser utilizada contra cualquier objetivo en el área de operaciones de la Segunda Brigada. El otro batallón, el Sexto de Cazadores, fue instalado en Constanza a partir del 5 de diciembre de 1972.

El autor de la obra señala que el comandante de ese batallón fue designado tras una sugerencia del MAAG. Este sería el mayor Carlos Castillo Pimentel. Incluso las insignias fueron diseñadas por el teniente coronel Edward Kelly, quien había tenido experiencias en la 101ª División Aerotransportada y en los Boinas Verdes de EEUU. De ahí que no debía sorprender que las insignias del Sexto Batallón de Cazadores fueran sumamente parecidas a las de esas instituciones militares estadounidenses en las que este asesor había servido.

Sin embargo, el hecho de que el MAAG se dedicara directamente a la formación de estos batallones provocó una ruptura de la cadena de mando del Ejército Nacional. En ocasiones, el Comandante del Sexto Batallón no obedecería al general Comandante de la Segunda Brigada estacionado en Santiago. Todo debía ser aprobado en la capital antes de que ese oficial se decidiera a obedecer. Peor aún, Castillo Pimentel llevó su relativa autonomía demasiado lejos al ignorar las jerarquías durante las operaciones contra la guerrilla de Caamaño. Fue entonces cuando lo relevaron de sus funciones aunque, oficiosamente, permaneció en el área de operaciones.

Balaguer y Cuba.

Llamó la atención de los asesores militares de Estados Unidos que el 24 de abril de 1973 el presidente Balaguer dejó claramente establecida su posición en relación con el gobierno revolucionario de Cuba. Esto tuvo lugar al responder a la pregunta hecha sobre ese tema por un miembro del Colegio Nacional de Guerra de Estados Unidos que visitaba el país. El Presidente explicó al visitante que no había evidencia firme de que el gobierno de Fidel Castro estaba detrás de la invasión de Caamaño. Hasta el momento las autoridades sólo habían encontrado vinculación con Cuba en una pomada inofensiva que estaba en una de las maletas dejadas en el Black Jack. Esta decía MINSAP en la etiqueta, acrónimo correspondiente al Ministerio de Salud Pública de Cuba. Por tal razón, la Organización de Estados Americanos no debía ser informada. Esta conversación aparece en la comunicación de la embajada de Estados Unidos en Santo Domingo remitida a Washington el 26 de abril de 1973.

Debilidades de las FFAA

Hasta donde el autor del libro conoce, la única crítica puramente militar de la operación contraguerrillera dominicana en 1973 fue el informe escrito por él en calidad de Agregado Militar de la Embajada estadounidense. Este fue titulado “Operación de Contrainsurgencia de las Fuerzas Rurales y Urbanas Dominicanas; Una Opinión Militar”. El análisis de esa operación sacó a la superficie algunos fallos que podrían significar grandes problemas para el país si tuviera que enfrentar una amenaza más grave que la de 1973. El coronel® Bosch fijó en cinco las críticas fundamentales en torno a la actuación de las Fuerzas Armadas dominicanas. Estas eran:

1- La deficiencia de la organización militar en todo el país, ya que el Secretario de las Fuerzas Armadas cedió parte de su autoridad al Jefe del Ejército Nacional;

2- La organización de la contrainsurgencia de 1973 fue uno de los peores ejemplos de profesionalismo militar;

3- Las operaciones de inteligencia en el área rural fueron pésimas, ya que no contaba con un sistema de recolección de información;

4- Debilidad de la logística militar en las operaciones; y

5- La capacidad de movilidad aérea fue totalmente inadecuada.

[1] Constabulary, forma de organización de los ejércitos para desempeñar funciones de policía política. EEUU practicaba ese estilo en la primera mitad del siglo 20, luego de las ocupaciones militares, tal como ocurrió en Filipinas, Nicaragua, Alemania y República Dominicana, entre otros.

Juan Bosch va a la clandestinidad

El día 7 de febrero la mayoría los dominicanos ya sabía que Bosch estaba escondido tratando de evadir la persecución de los cuerpos de seguridad de Balaguer. El autor del libro recoge opiniones diversas para concluir que el gobierno siempre supo dónde se encontraba escondido el líder político pero no estaba interesado en capturarlo. Más bien aquella acción estaba orientada a hostigar a Bosch y lesionar su imagen ante la ciudadanía al presentarlo como un hombre que no enfrentaba las situaciones de crisis.

El coronel® Brian J. Bosch describe cómo el 8 de febrero de 1973 la embajada de Estados Unidos recibió una carta suscrita por Juan Bosch, enviada a través de intermediarios. En ella le explicaba al embajador Francis Melloy su posición política del momento. Informaba que la guerrilla de Caamaño había realmente desembarcado por la bahía de Ocoa el día 2 de febrero y que solamente uno de los guerrilleros había llegado hasta la capital, no dos como informó el presidente Balaguer. Bosch sostuvo en su carta al embajador que había obtenido esa información el día 3 de febrero, un día antes de lo supieran las Fuerzas Armadas dominicanas.

Expresó en esa comunicación que él y el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) no estaban involucrados con la expedición de Caamaño. El autor del libro no explica razón alguna por la que Juan Bosch informaba a la embajada estadounidense sobre asuntos tan delicados mientras la guerrilla trataba de sobrevivir.

Fuente: Periódico HOY de hoy.

domingo, marzo 30, 2008

¿Por qué hoy tan lejanos esos tiempos vuelven y revuelven mis pensamientos?

EL COLMO DE LA VIDA ES CONTAR LO QUE NOS PASA

La poesia es ineherente al ser humano. No podemos negar que en alguna ocasion nos asalto la motivacion de plasmar en un papel lo que nos pasa o sentimos. Estas lineas no son mas que esos momentos mios. Momentos que por ratos sangran dentro de mi y no cesan ni se pueden callar. Momentos convertidos en poesia que son un grito adolorido en contra de las injusticias y el oprobio; y a favor de los que entregaron su vida para que otros disfruten de un mundo mejor. Esa virtud de los hombres, ese raro encanto, esa condicion, ese arar en tierras donde se es libre o se muere, los eleva a la dimension de heroes.

POEMAS PARA HEROES

NO PODRAN

Podrán evitarlo todo
mas no podrán evitar una lágrima

Una lágrima leve
que se derrama presurosa por la mejilla
cada diciembre



















Para Manolo Tavarez Justo
Diciembre 2000


MI HERMANO

Mi hermano
nacio
como un grano de arena
una noche de abril en primavera

Extendio sus alas hasta la cima de los montes
y volo y volo a la libertad
y llego a la muerte
a combatir la represion
a revivir la lucha

Mi hermano
murio
empuñando un fusil
y sin manchas
fue gris aquella tarde

Era Febrero

Dedicado al Coronel de Abril, Enero 2002


LOS DIAS QUE HAY QUE AMAR

No hay fuegos que amar
ni dias de arrepentirse
no hay muerte siquiera Comandante
solo tu sepultura vestida de verde

La montaña se tiñe del rojo sangre de tus venas
se escucha a lo lejos el grito mortal
y la insaciable voracidad de los que matan

Se agita con fuerza el corazon

Tu espiritu valeroso
bajara desde la cima
como cada año
a ponernos pan en la mesa
a visitar nuestro mundo

Como cada año

No habra escondite para alejarnos
de tus pasos esta noche

Misteriosamente nos llevaras de la mano
y nos montaras en tus hombros mortales
y pasearemos por Nizaito
nos convidaras de tu fe
para seguir creyendo en tus ideas

Que largo es el camino que comenzaste
y debemos terminar
pero sabemos que estas alli guiandonos
vigilante Comandante

Que todas las noches enciendes una velita
para calentar las alacenas
para que la llama siga ardiendo entre nosotros
y nos prenda por dentro la sangre
y nos convide a quemar los montes
a sacrificarnos

No podremos evitar la rabia
aunque no quisieramos estara
otra vez esta noche

A Francis Caamaño, heroe
Febrero 2006


GIGANTE

Un gigante ha caído
el sábado largo de aquel mes
y aquel año sombrío

En la tarde se desvistieron la casaca de la pasión
los incrédulos

La luz que caía
destecho las chozas

Las mariposas lloraron
colores al viento

Ojalá la sepultura
Comandante
le sea mas liviana
que su lucha









Para el Comandante Roman
San Pedro de Macorix, Mayo 2003


ENERO

Sangre indómita derramada
no en vano
por niños que juegan a ser grandes
grandes hombres

Patrullan las cuevas del páramo
buscando extraer la sal del agua de mar
transformar la arena en gritos de guerra
y en anhelos dorados de libertad


Resucitaron las estalactitas
y los trazos indígenas
del letargo impuesto por metrallas asesinas
propiedad de tiranos rastreros que ostentan el poder del pueblo

Deciden quien vive quien muere
los asesinos

Luego del silbato
otra vez al mediodía sentí el taladreo voraz
de la espada de la muerte en mi pecho
la misma que cercenó la juventud de mis hermanos

Y engrandeció la dignidad
la de ellos

Fue en Enero

La rabia cegó los ojos del porvenir

Las grietas de la tierra estallaron en llanto
las venas de los hombres cansadas de esperar
convirtieron los brazos de las cuevas
en largos caminos que conducen al martirio.

Decidieron quien vive quien muere
ellos mismos los asesinos





















Para Amaury Germán Aristy y los mártires del 12 de Enero de 1972.
Mayo 2003

UN MINUTO MAS

Un minuto mas
y no hay silencio
solo aplausos prolongados por sus vidas
es como si no pudiera parar de aplaudir

No callaremos la muerte
un minuto mas
los ojos empañados de lagrimas
miraran al infinito
un minuto mas

Un minuto mas
solo uno les pido
una tregua por los caidos
una bandera negra en la ventana

Las cuevas conservan
el recuerdo fugaz de sus cuerpos
un minuto mas

Por las grietas brotan lagrimas de impotencia
que esculpen el recuerdo
desesperado
un minuto mas alla
aqui estaremos esperando


Para Amaury y los muchachos de Enero 1972. Martires
Enero 2004


GAVILLEROS GAVILLEROS

Gavilleros gavilleros
los llamaron las bestias
despectivamente amables
rabiosamente Dominicanos.

Lucharon desde su altura
contra la bota imperial
su faro fue el primero
que iluminó nuestros senderos.

Con su nombre han nombrado bandidos
que injustos
reciban el homenaje de estas líneas
ustedes que cayeron
defendiendo la Patria pisoteada.

Julio 2003

A los sublevados en contra de la intervención norteamericana

de 1916, llamados despectivamente gavilleros.


miércoles, marzo 19, 2008

Francisco Alberto Caramba de Ramon Leonardo

Hermosa cancion del dominicano Ramon Leonardo, mas que una cancion es un himno. Fue compuesta en 1973 despues del fusilamiento de Caamaño.

Caramba caramba
Francisco Alberto caramba
mi comandante te hiciste
te hiciste el muerto en la sierra
se lo creyeron, que bueno!
Francisco Alberto caramba

Ellos contaron el cuento
Francisco Alberto
y ellos no lo creyeron
que tu te has ido no es cierto
tu estas viviendo en el pueblo
Francisco Alberto

Te sembraste en las montañas
Francisco Alberto de Ocoa
y engañaste los de arriba
los generales y el miedo
Francisco Alberto me alegro
Francisco Alberto caramba

Media isla
en la zozobra del luto y de la sangre
media isla
y la presencia centenaria de los yanquis

Media isla
media isla bañada de febrero en Caracoles
Francisco Alberto, Peña Jáquez, Galán
Claudio, Pérez Vargas, Hamlet, Payero Ulloa
Holguín Marte y Lalane

Dijeron que estabas muerto
Francisco Alberto caramba
y que en un sitio ignorado
enterraron tu fúsil
Francisco Alberto
y tu cuerpo

Francisco Alberto caramba
ellos contaron el cuento
Francisco Alberto
y ellos no lo creyeron
que tu te has ido no es cierto
tu estas viviendo en el pueblo

Francisco Alberto
Francisco Alberto
mira tu pueblo
hoy tu gesto es su alimento
ya no hay miedo ni silencio
y están siguiendo tu ejemplo

Francisco Alberto me alegro
Francisco Alberto Caramba

Homenaje grafico para el Coronel Francisco Caamaño

jueves, marzo 13, 2008

Te saludo, me despido



Esta hermosa cancion fue compuesta por Carlos Elias y Victor Victor y popularizada en la voz de Sonia Silvestre. Esta dedicada a Francis Caamaño.


Te saludo, me despido


Con la tristeza del arbol caido

Te saludo Comandante, te saludo

Por que no basta para tu fuerza libertaria
el afiche del aula, el elogio casual

Te saludo Comandante, te saludo

Por que siempre ocupaste tu puesto
dejando el corazon en la piel de la montaña

Te saludo Comandante, te saludo

Con la verguenza de no conocer la vereda
que lleva hasta Ocoa

Te saludo Comandante, te saludo

Por que tu muerte apago la ruidosa balada
de la libertad

Te saludo Comandante, te saludo

Y para que no muera el canto de tu fusil

Te saludo, me despido, te saludo, me despido
Comandante

Comandante te saludo, me despido
Comandante

domingo, marzo 09, 2008

Carta del Coronel Fernandez Dominguez a Caamaño, Jose Caonabo Fernandez, Miguel Hernando y Hector Lachapelle


San Juan, P.R.
1 de Enero de 1965

A mis hermanos de profesion y de principios: Francis Caamaño, Jose Caonabo Fernandez, Miguel A. Hernando, Hector E. Lachapelle D.

Cuando un hombre y en especial un 'hombre militar' jura y compromete su honor en una accion determinada en contra de sus enemigos, ya sean nacionales o extranjeros, toma la obligacion mas grande de su vida. Yo he jurado ante ustedes y con ustedes, provocar y dirigir una accion en contra del gobierno de nuestro pais; y para este juramento poco han importado las apreciaciones de los efectivos a nuestro favor. Lo que convinimos que sobra es coraje, decision y voluntad de servirle a nuestro pueblo que por nuestra propia culpa se debate hoy en el mas negro de los abismos.

No es mi intencion cansarles con todos los problemas que ustedes conocen mejor que yo; mi intencion exclusivamente es hacerles de cocnocimiento mi ultima decision:

Yo entrare al pais (clandestinamente) y a partir de ese momento, previa coordinacion con ustedes, iniciaremos las acciones correspondientes; hay que apuntar que, si alguien poniendo su seguridad y bienestar personal por encima del deber, el honor y la Patria, viola deliberadamente su juramento, sera responsable ante el pueblo, la historia y el mundo del sacrificio de todos los demas.

Una ultima advertencia: recuerden que la victoria siempre acompaña a los decididos.

Que la suerte nos acompañe!!!!!!

VIVA LA REPUBLICA DOMINICANA!!!!!!!

miércoles, marzo 05, 2008

Una bala yanqui: fria, asesina y cobarde

Este articulo fue escrito por mi hermano ZaFarrancho, patriota sin igual y militante de las mas nobles causas del pueblo dominicano.

El 19 de Mayo, de aquel año glorioso, el cual debió quedarse en la memoria de los dominicanos como el año de la rectificación y del camino hacia la democracia social y económica del país, y del tan anhelado decoro reclamado por tan vibrante juventud. En esta fecha un grupo de hombres se preparaba para dar el giro que necesitaba la lucha del pueblo, detenida por la vergonzosa y descarada invasión extranjera.

Un gran objetivo: El Palacio Nacional, símbolo del poder del Estado Dominicano. El cual se encontraba en las afueras de la zona que controlaban los constitucionalistas, muy cerca de un área neutral permitida inicialmente por el gobierno de Caamaño y que servia para la evacuación de ciudadanos extranjeros, y que en realidad lo que perseguia era dividir la zona rebelde.

La Casa de Gobierno estaba custodiada por un pequeño grupo de hombres, motivo por el cual la operación lucia factible. A los patriotas que intentaban la toma del Palacio (no obstante conocedores del peligro que corrian), les sobraba coraje, vergüenza y decisión para lograr el triunfo simbólico que cambiaría el curso de la guerra.

En la zona del honor, los valientes se preparaban, cargaban sus fusiles, calzaban sus botas y se preparaban en silencio, un silencio inquebrantable. Estaban concientes del peligro que les asechaba. Corría el rumor por las calles. A pocos metros del Palacio se encontraba el asesino, blandiendo su fusil criminal; francotiradores desalmados, destructores de sueños de reivindicación, se guarecían silentes, en la posición indicada en el momento desgraciado.

31 años de dictadura no impidieron que una nueva generación de soldados cuyos padres estuvieron comprometidos con las cadenas de la opresión, iluminaran el camino que debíamos seguir en la quebrantada e incipiente democracia.

Dichos hombres junto a los jóvenes del movimiento revolucionario Catorce de Junio (1J4) que levantaba la antorcha dejada por aquella raza inmortal, se unieron en el decisivo momento, que necesitaba la historia para tornar el momento a favor del pueblo.

En un principio la desconfianza se adueño de ambos grupos de valerosos hombres, los verdinegros, con toda la razón, pues vieron a su máximo líder caer bajo la traición y las falsas promesas de ese mismo ejército al que pertenecían este selecto grupo de hombres. Los guardias constitucionalistas por las décadas de mentira y difamación de que fueron objeto todos aquellos que tuvieron ideas progresistas y más aún ideas Marxistas.

La hora de salida de aproximaba, en la ciudad se reflejaba la expectativa de que algo estaba por suceder, la Puerta del Conde observaba absorta la salida reivindicadora de los jóvenes democratas que reclamaban con las armas, lo que la diplomacia se negaba a entregarle al pueblo dominicano.

Se aproxima el cambio de guardia en la posición asesina, y llega sediento de sangre el criminal mercenario de una lucha ilegitima, a la cual no debió presentarse. Balas asesinas fabricadas probablemente en algún estado de la flamante Unión, para dar empleo y progreso a los hijos de la gran nación opresora.

El grupo toma el camino los llevará a la cita histórica. Unos metros antes de la verja perimetral del Palacio comienza el combate, los luchadores del pueblo avanzan hacia el objetivo, pero un sorpresivo y descarado ataque por la espalda los sorprende y coloca entre dos fuegos. El Coronel Fernández Domínguez es el primero en caer, el valiente líder del 1J4 Juan Miguel Román va en su auxilio en un noble gesto que le costo la vida. Dos lideres de dos grupos progresistas, enamorados de su país como pocos han existido y existirían en los años por venir. Un gesto que debe quedar grabado en la memoria de todos los dominicanos como un ejemplo de unidad de fuerzas progresistas, de confianza mutua y decoro.

Hombres valerosos de los cuales la Patria no podía prescindir para el difícil futuro que le esperaba, dominado por la corrupción, los antivalores, el oportunismo y la decadencia total de la política en la Republica Dominicana.

En las primeras horas de la noche corre la noticia, noticia triste de la que se dice envolvió la zona de la libertad en un profundo dolor. Pero en el firmamento y en lo profundo del alma del pueblo se escribieron nombres que sirvieron y servirán de alimento para que los sueños de una vida mejor, más justa y equitativa, de una verdadera independencia económica se hagan realidad y muestren el camino con su luz a los nuevos dominicanos.

Morir? todos moriremos algún día, aquellos que saquearon el país y mataron lo mejor de la juventud dominicana, aquellos asesinos también morirán, aunque sea de viejos. Los que mataron a las Hermanas Mirabal morirán algún día; moriran los que asesinaron al Comando Central del 1J4 que se entregó en Manaclas, incluyendo a su más grande líder Manuel Aurelio Tavarez Justo, violando todo tratado internacional de guerra; los pilotos que ametrallaron la cabecera del puente Duarte morirán; el yanqui que disparó cobardemente al Coronel Fernández Domínguez y a Juan Miguel Román morira. Todos los personeros de aquella época morirán. Los que fusilaron al Coronel de Abril también morirán.

Pero nuestros héroes, no moriran. Ellos viven y nos muestran el camino. Y mientras exista esta Nación sus nombres estarán escritos con sangre en el alma del pueblo dominicano.

lunes, febrero 25, 2008

Cita con angeles de Silvio Rodriguez con la estrofa dedicada al Coronel Caamaño



Desde los tiempos más remotos
vuelan los ángeles guardianes,
siempre celosos de sus votos
contra atropellos y desmanes.
Junto a las cunas infantiles,
junto los tristes moribundos,
cuentan que velan los gentiles
seres con alas de otro mundo.

Cuando este ángel surca el cielo,
no hay nada que se le asemeje.
El fin de su apurado vuelo
es la sentencia de un hereje.
No se distraiga ni demore,
todo es ahora inoportuno.
Va rumbo al campo de las flores
donde la hoguera espera a Bruno.

Se lanza un ángel de la altura,
caída libre que da frío.
La orden de su jefatura
es descender hasta Dos Ríos.
Es 19 y también mayo,
monte de espuma y madre sierra,
cuando otro ángel a caballo
cae “con los pobres de la tierra”.

Dicen que al filo de la una
un angelote compasivo
pasó delante de la luna,
sobrevolando los olivos.
Y cuentan que con mala maña
fue tiroteado su abanico,
justo a la hora que en España
se nos mataba a Federico.

Un bello arcángel aletea
junto a un gran pájaro de hierro.
Procura que un hombre lo vea
para ahuyentar cien mil destierros.
Pero el arcángel se sofoca
y un ala azul se le lastima
y el ave negra abre la boca
cuando atraviesan Hiroshima.

Dejando un surco luminoso
por sobre Memphis, Tennessee,
pasó volando presuroso
un ser alado en frenesí.
Iba vistiéndose de luto,
iba llorando el querubín
e iba contando los minutos
de Dios y Martin Luther King.

El ángel pasa bajo un puente,
después rodea un rascacielos.
Parque Central, lleno de gente,
no se da cuenta de su vuelo.
Cuánta utopía será rota
y cuánta imaginación
cuando a la puerta del Dakota
las balas derriben a John.

Abril nacio como esperanza
a treinta y tantos años de Trujillo
se abrieron bocas que callaban
las voces de Santo Domingo
quedo dormido en sus montañas
un angel fuera del rebaño
lo despertaron las pestañas
que cerraban a Caamaño.

Septiembre aúlla todavía
su doble saldo escalofriante.
Todo sucede un mismo día
gracias a un odio semejante.
Y el mismo ángel que allá en Chile
vio bombardear al presidente,
ve las dos torres con sus miles
cayendo inolvidablemente.

Desesperados, los querubes
toman los cielos de la tierra
y con sus lápices de nubes
pintan adioses a las guerras.
El mundo llena los balcones
y exclama al fin: esta es mi lucha,
pero el señor de los cañones
no mira al cielo ni lo escucha.

Pobres los ángeles urgentes
que nunca llegan a salvarnos.
¿Será que son incompetentes
o que no hay forma de ayudarnos?
Para evitarles más dolores
y cuentas del sicoanalista,
seamos un tilín mejores
y mucho menos egoístas.

domingo, febrero 24, 2008

Breve biografia del Coronel Francisco Caamaño Deño:


Francisco Alberto Caamaño Deño, nacio el 11 de Junio de 1932 en Santo Domingo, hijo del Teniente General Fausto Caamaño Medina y la Sra. Enerolisa Deño (Nonin). Francis como le llamaban sus allegados, fue desde pequeño dueño de un caracter fuerte y autoritario.

Inicia su carrera militar en la Marina de Guerra, a la cual ingresa en 1949. Es transferido a la Policia Nacional en 1960 con el rango de Mayor. En 1962, es nombrado Jefe del Cuerpo contra motines (cascos blancos), por aquellos dias el principal aparato represor con que contaba la Policia.


Golpe de estado al gobierno de Bosch y Revolucion de Abril 1965:



El 27 de Febrero del 1963, asume como Presidente de la Republica Dominicana el Profesor Juan Bosch,quien habia sido elegido en diciembre de 1962, en las primeras elecciones libres despues de la desaparicion de Trujillo. Una confabulacion entre sectores poderosos de la Iglesia Catolica, la oligarquia dominicana y las Fuerzas Armadas dominicanas, alentados y patrocinados por el gobierno de los Estados Unidos de Norteamerica dieron un golpe de estado a Bosch el 25 de Septiembre de 1963, y con el se llevaron la constitucion progresista redactada y promulgada en su gobierno. Tras el golpe, y la imposicion en el poder de un Triunvirato (gobierno de tres), se dan las condiciones propicias para que un grupo de militares honestos y leales opuestos a las practicas represivas, no democraticas y corruptas del gobierno de facto, inicien labores conspirativas para reestablecer el legitimo gobierno. El lider de esos militares era el Coronel Rafael Tomas Fernandez Dominguez, honesto y correctisimo militar, quien recluta a compañeros de armas para que contribuyan desde sus puestos militares al reestablecimiento del orden constitucional y al retorno de Bosch desde el exilio. En diciembre de 1964, el Coronel Caamaño queda comprometido en el movimiento, y sobre sus hombros reposaba la encomienda de sublevar la Policia Nacional en el momento del alzamiento constitucionalista.

El 24 de abril sorprende al Coronel Fernandez Dominguez en Chile donde habia sido enviado como agregado militar de la Embajada dominicana en ese pais. Debido a la ausencia del lider de la sublevacion, habia quedado al mando el Coronel Hernando Ramirez, quien abandono el liderazgo de la revuelta desde el 26 de Abril, y jamas volvio a aparecer por las trincheras en todo el curso de la guerra. Por las circunstancias expuestas anteriormente, el Coronel Francisco Alberto Caamaño Deño, asume la responsabilidad y el liderazgo militar de la Revolucion, y junto a un sin numero de oficiales, cabos, rasos y civiles (mujeres y hombres), organizan la resistencia armada contra las fuerzas del CEFA (Centro de enseñanza de las Fuerzas Armadas), lidereadas desde San Isidro por el General golpista y traidor a la Patria Elias Wessin y Wessin.


La Batalla del Puente Duarte y la intervencion norteamericana:

El 24 de Abril, luego de la sublevacion de los campamentos militares 16 de Agosto y 27 de Febrero, y del anuncio formal del estallido de la Revolucion, reina la confusion, el caos y la desorganizacion de las fuerzas. Se inician los bombardeos sobre Santo Domingo y con estos la renuncia y asilamiento del Presidente provisional Molina Ureña, del jefe del movimiento constitucionalista Coronel Ramirez, y de la mayoria de los comprometidos con la lucha; el Coronel Caamaño desorientado y aturdido, pasa la noche del 26 de Abril en calidad de asilado en la Embajada de El Salvador. A la mañana siguiente sale de la embajada y asume el mando militar de la Revolucion, reorganiza las fuerzas que estan dispersas en Santo Domingo, y se dirige a la cabeza del Puente Duarte a impedir junto a un grupo de valientes la entrada a la ciudad de los tanques y los soldados golpistas del CEFA.

Nunca un combate tan desigual en numero y armas habia sido tan glorioso; nunca un puñado de militares habia combatido con tanta ferocidad por la libertad de la Patria; nunca un pueblo enfrento fuerzas tan numerosas y tan bien equipadas con los puños, con piedras, con palos, con pedazos de hierro. Alli brillo el Coronel Caamaño por vez primera, alli hizo una alianza con el pueblo que no se romperia nunca mas. Alli nacio el Coronel de Abril.

De todas las batallas de la guerra de Abril, la del puente Duarte fue la mas importante, por que evito la entrada de los de San Isidro a la capital.

Tras el desembarco de los marines norteamericanos, el 28 de abril, los constitucionalistas fueron obligados a replegarse en la ciudad intramuros, donde a partir de entonces el pueblo y los militares al mando de Caamaño establecieron una lucha hombre a hombre y casa por casa contra el ejercito invasor y su contraparte golpista dominicana.






Firma del Acta Institucional y Acta de Reconciliacion Dominicana:


El 3 de Mayo del 1965 es nombrado por el Congreso Nacional Presidente en armas de la Republica Dominicana, cargo que desempeño con dignidad y decoro hasta la entrega del mando el 3 de Septiembre en la Fortaleza Ozama, fecha en la cual se firmaron los acuerdos de cese al fuego con el Acta Institucional y Acta de Reconciliacion Dominicana, dando paso al gobierno provisional de Hector Garcia Godoy, quien llego a la presidencia con la obligacion de organizar elecciones libres en un plazo no mayor de 6 meses.

Luego del traspaso de mando los oficiales constitucionalistas y los combatientes del pueblo entregaron las armas y algunos de ellos fueron reintegrados a sus puestos en el escalafon militar, pero la mayoria fueron perseguidos, asesinados o deportados como fue el caso del Coronel Caamaño, quien fue nombrado en 1966 "agregado militar" de la embajada Dominicana en Londres, donde residio por un tiempo hasta que "desaparecio" con rumbo desconocido y aparecio en Cuba en 1967, donde se preparaba junto a un grupo de jovenes dominicanos para volver al pais a reactivar la lucha contra los remanentes del trujillato, esta vez encarnado por Joaquin Balaguer.

Continuara...

Discursos de Francisco Alberto Caamaño

Discurso pronunciado el 3 de Septiembre de 1965. Entrega del mandato presidencial


Señores miembros del Congreso Nacional

Pueblo Dominicano:

Porque me dio el pueblo el poder, al pueblo vengo a devolver lo que le pertenece. Ningún poder es legítimo si no es otorgado por el pueblo, cuya voluntad soberana es fuente de todo mandato público. El 3 de mayo de 1965, el Congreso Nacional me honró eligiéndome Presidente Constitucional de la República Dominicana. Solamente así podía aceptar tan alto cargo, porque siempre he creído que el derecho a gobernar no puede emanar de nadie más que no sea del pueblo mismo.

Bien legítimo era ese derecho, forjado por nuestras grandes mayorías nacionales en las elecciones más puras de toda nuestra historia, y depositado en mis manos en momentos en que el pueblo dominicano se batía, a sangre y fuego, para reconquistar sus instituciones democráticas. Estas instituciones, surgidas de la consulta electoral del 20 de diciembre de 1962, fueron devoradas por la infamia y la ambición de una minoría que siempre ha despreciado la voluntad popular.

Los dominicanos se batían a sangre y fuego, porque esa minoría le arrebató sus libertades el 25 de septiembre de 1963. Esa minoría es la misma que siempre ha robado, encarcelado, deportado y asesinado a nuestro pueblo. Y esa minoría, representada por el Triunvirato que presidió Donald Reid, se llegó a creer que este país le pertenecía y que sus habitantes eran sus esclavos.

Todos esos vicios y errores significaban mayores dolores y miseria para el pueblo. La vida se hacía insoportable. Ni una sola esperanza cabía en el alma de los dominicanos mientras se mantuvieran gobernando los usurpadores del poder. Para que renaciera esa esperanza se hacía necesario volver al gobierno libremente electo, es decir, a la democracia de la Constitución de 1963. Todo indicaba que la minoría gobernante, que pensaba y actuaba como propietaria de la nación, permanecería en el poder aún en contra de los más vivos reclamos populares, orientados hacia el rescate del régimen democrático.

La rebelión armada contra la ilegitimidad de su mando se convirtió entonces en una imperiosa necesidad social. Fruto de esa necesidad, y de la determinación de los dominicanos a ser libres, sin importarles la cuantía del precio, estalla el glorioso movimiento 24 de abril.

Ese Movimiento, inspirado en el más noble espíritu democrático, no era un cuartelazo más. Razón tenía el profesor Juan Bosch cuando dijo, desde su obligado exilio en Puerto Rico, que los dominicanos estábamos librando una revolución social. Así era porque los sectores democráticos del pueblo, tras mucho sufrimiento y mayores frustraciones, habían tomado profunda conciencia de su papel histórico y, hermanados con los militares que respetamos el juramento de defender la majestad de las leyes, se lanzaron a la calle en busca de su libertad perdida.

Heroicamente, con más fe que armas, y con enorme caudal de dignidad, el pueblo dominicano abría de par en par las puertas de la Historia para construir su futuro. Hondas, muy profundas eran las raíces de esa lucha. Desde la Independencia, desde la Restauración, caminaba el pueblo muriendo y venciendo tras su derecho a ser libre. El 24 de abril era un paso gigantesco hacia la construcción de ese derecho y hacia la democracia que lo consagra plenamente.

Los enemigos del pueblo, aquellos que por encima de los intereses de la Patria colocan sus propios intereses en un vano empeño por mantenerse en el poder, hacían correr, como ríos, la sangre generosa. Pero sobre nuestros muertos, nos levantamos siempre con mayor fuerza. La Revolución avanzaba triunfante. América entera miraba con admiración hacia esta tierra, esperando ansiosa nuestro triunfo, porque en él veía una victoria de la democracia sobre las minorías opresoras que azotan, como plagas, todo el Continente Americano.

Desgraciadamente, el 28 de abril, cuatro días después de iniciada la Revolución, cuando la libertad renacía vencedora, cuando todo un pueblo se volcaba fervorosamente hacia el encuentro con la democracia, el Gobierno de los Estados Unidos de América, violando la soberanía de nuestro Estado Independiente, y burlando los principios fundamentales que sostienen la convivencia internacional, invadió y ocupó militarmente nuestro suelo.

¿Qué derecho podían invocar los gobernantes norteamericanos para atropellar así la libertad de un pueblo soberano? ¡Ninguno! Se hacían culpables de un gravísimo delito, que atentaba contra nuestra nación. Contra América y contra el resto del mundo. El principio de No Intervención, base fundamental de las relaciones entre los pueblos civilizados, fue tan brutalmente desconocido que aún se escucha por toda la vastedad del planeta el eco de la más dura repulsa contra los invasores.

En este continente de hermanos, al lado del clamor de los Gobiernos de Chile, Uruguay, México, Perú y Ecuador, que encauzaron su actuación internacional haciendo honor al sentimiento de fraternidad continental de sus respectivos pueblos, se escucha así mismo, en defensa de la No Intervención y de la soberanía de nuestro país, la vibrante y solidaria protesta de millones de latinoamericanos indignados.

La humillación que el gobierno de los Estados Unidos de América del Norte hacía sufrir a la República Dominicana, militarmente invadida, significa también una dolorosa humillación para toda América. ¿Qué normas, qué principios pueden servir a las naciones americanas para hacer valer su vocación y su derecho a la independencia, cuando los gobernantes norteamericanos decidan, con vanas excusas y apoyados en la fuerza de sus cañones, imponerles su destino político? ¿A dónde ir a reclamar para que reconozca el derecho de un pueblo a ser independiente y dueño de su propia vida? ¿Qué organismos, qué instituciones serán capaces de defender esos derechos y de alentar a los pueblos a ejercerlos, sin temor a la intrusión de los que se han erigido en árbitros de la determinación ajena?

Para desgracia de la República Dominicana y para desgracia de América, la Organización de Estados Americanos, en vez de asumir la defensa de nuestra soberanía, en vez de sancionar severamente la intervención militar para hacer de este modo honor a los principios que dice sustentar, no sólo se colocó de espaldas a su propia Carta Constitutiva, sino que también empujó, aún más, el puñal que hoy se clava en el corazón de nuestra patria.

Cuatro días después de la intervención militar norteamericana, la Organización de Estados Americanos decidió que se hiciera «todo lo posible para procurar el restablecimiento de la paz y la normalidad en la República Dominicana». En el texto de la Resolución que expresa lo citado nada se decía acerca de la violación de nuestra soberanía. ¡Nada! Ni una sola palabra hace referencia al monstruoso crimen del 28 de abril de 1965, que por largo tiempo conmoverá a los frágiles cimientos del orden jurídico interamericano. Todo lo contrario. La Organización de Estados Americanos se empeñaba entonces, ignorando y torciendo los principios, en justificar y validar la intervención militar norteamericana. Y así creyó hacerlo creando la Fuerza Interamericana. La Resolución que consagra esa funesta medida, registrada como Documento Rec.2 de la Décima Reunión de Consulta de Ministros Americanos, revela muy a las claras la actitud del organismo regional a ese respecto. En efecto, en ella se lee lo siguiente: «Que la integración de una Fuerza Interamericana significará, ipso facto, la transformación de las fuerzas presentes en territorio dominicano en otra fuerza que no será de un Estado sino de un organismo inter-estatal...»

¡Transformación! He ahí la palabra que delata la convivencia de la Organización de Estados Americanos con los invasores. Se transformaban los «marines» en Fuerza Interamericana. Aquello fue la institucionalización del delito político como norma de las relaciones internacionales de nuestro continente.

La intervención norteamericana vino, pues, a detener el triunfo de la democracia dominicana y a apuntalar a la minoría que le niega y le disputa sus derechos a nuestros pueblos. Tras el llamado Gobierno de Reconstrucción Nacional, obra de los funcionarios de la intervención extranjera, se echó al desprecio al pueblo, se fortaleció la corrupción, y el crimen se extendió por todo el país.

A pesar de la frustración momentánea que en esos trágicos días sufriera la Revolución, el Gobierno Constitucional decidió defender sus derechos. Naturalmente, ante la violencia y la fuerza del poderío norteamericano, representado por más de 40 000 soldados, ya no era posible el triunfo armado del movimiento democrático dominicano. Tuvimos que negociar con los invasores a fin de conservar parte del tesoro de democracia que habíamos comenzado a crear.

En la mes de negociaciones defendimos siempre los principios. Si abandonamos algunas de las conquistas por las que el pueblo dominicano se lanzó a la lucha, no se debió a que los negociadores de la Organización de Estados Americanos trajeran proposiciones de un mayor contenido democrático que el perseguido en nuestros objetivos iniciales. Cedimos solamente ante la realidad que nos imponía la intervención americana. El corredor que las tropas extranjeras establecieron, arbitraria e injustificadamente, dividiendo la ciudad en dos, no tuvo otra razón que la de evitar que nuestra lucha se extendiera, desde esta gloriosa ciudad, hacia todo el resto del país.

Las ansias democráticas habían hecho vibrar la República entera. La causa que con las armas en las manos defendía el pueblo de Santo Domingo era la causa nacional. Esta ciudad cuatro veces centenaria fue la vanguardia, y desde ella nos lanzamos, triunfantes contra los opresores criollos. Se vislumbraba ya la victoria de las armas democráticas, y cuando estábamos a punto de lograrla plenamente, Estados Unidos de América se interpone, invadiéndonos para salvaguardar los peores intereses y las más ruines ambiciones.

Fue entonces cuando tuvimos que ceder en algunos de nuestros objetivos, porque no podíamos vencer con las armas. Pero a pesar de toda la fuerza y de toda la violencia del poderío militar norteamericano, no cedimos por temor o por miedo a ser vencidos. Testigo es el mundo de la lucha que libramos, del coraje y la valentía de ese pueblo en el terreno del honor y en el campo de batalla.

Oportuno es que me detenga aquí para rendir homenaje a los héroes que entregaron sus vidas luchando por la democracia y la soberanía nacionales. Ese Combatiente Desconocido, que reposa en esta Plaza de la Constitución, es el símbolo del sacrificio y del amor de los dominicanos por su libertad. Como él, murieron miles. De ese semillero de héroes crecerá vigoroso el futuro de la patria. Porque héroes son los que dieron la vida tratando de evitar que se creara el corredor internacional que detuvo nuestra marcha victoriosa. Porque héroes son los que, con piedras en las manos, detuvieron los tanques de acero en el Puente Duarte. Héroes son los que defendieron hasta el último aliento la Zona Norte de la ciudad; héroes son los que recibieron, impávidos, los ataques aéreos al Palacio Nacional; héroes los que durante los días 15 y 16 de junio recibieron valientemente la metralla extranjera; héroes los del 29 de agosto; héroes también los que han muerto en todos nuestros frentes, en campos y ciudades defendiendo la integridad nacional.

Nunca tal vez en la vida de los dominicanos se había luchado con tanta tenacidad contra un enemigo tan superior en número y en armas. Luchamos, sí, con bravura de leyenda, porque íbamos desbrozando con la razón el camino de la Historia.

No pudimos vencer, pero tampoco pudimos ser vencidos. La verdad auspiciada por nuestra causa fue la mayor fuerza y el mayor aliento para resistir. ¡Y resistimos! Ese es nuestro triunfo porque sin la tenaz resistencia que opusimos, hoy no pudiéramos ufanarnos de los objetivos logrados.

Nosotros cedimos, es cierto, pero ellos, los invasores que vinieron a impedir nuestra revolución, a destruir nuestra causa tuvieron que ceder también ante el espíritu revolucionario de nuestro pueblo.

Ahí están, hablando por sí solas, las conquistas alcanzadas y que constan, engrandecidas por la sangre de los caídos, en el Acta Institucional y en el Acta de Reconciliación Dominicana. Se nos han reconocido múltiples derechos económicos y sociales. Hemos logrado la fijación de elecciones libres a breve plazo. Hemos conquistado las libertades públicas, el respeto a los derechos humanos; el regreso de los exiliados políticos, el derecho de todo dominicano a vivir en su patria sin temor a ser deportado. Pero, por encima de todo, hemos logrado una conquista inapreciable, de fecundas proyecciones futuras: ¡La conciencia democrática! Conciencia contra el golpismo, contra la corrupción administrativa, contra el nepotismo, contra la explotación y contra el intervencionismo. Hemos conquistado conciencia de nuestro propio destino histórico. En suma, conciencia del pueblo en su fuerza, que si el 24 de Abril le sirvió para derrotar a las oligarquías civil y militar, hoy, nutrida por esa maravillosa experiencia y esta lucha asombrosa le permitirá forjar, en la paz o en la guerra, su libertad y su independencia. ¡Despertó el pueblo porque despertó su conciencia!

Esos son los logros de esta revolución. No solamente nuestros, sino también de América. Los principios que aquí han sido defendidos son los mismos que hoy conmueven a todas sus naciones. Cuando los pueblos situados al sur del Río Bravo expresaban su solidaridad con nuestra lucha, junto al estímulo fraternal iban también, profundamente unidas, sus más caras e íntimas aspiraciones. Desde México hasta Argentina la democracia es el sueño de millones de hombres que quieren convertir en realidad. Sueño de paz creadora, de paz y libertad decorosa. Pero ese bello sueño es turbado, hasta convertirse en pesadilla, por la codicia y la explotación de minorías ajenas al noble ideal de la convivencia humana.

Si algún mérito me cabe por haber participado preeminentemente en esta revolución democrática, gracias al honroso mandato presidencial que me otorgara el Honorable Congreso Nacional, no es otro que el de haber comprendido esa dolorosa realidad de nuestro pueblo, y haber luchado ardientemente por tratar de transformarla en un porvenir cargado de esperanzas.

Creo firmemente que el pueblo dominicano terminará por lograr su felicidad, y el 24 de Abril será siempre un símbolo estimulante hacia la consecución definitiva de ella. Es nuestra obligación, como defensores de la democracia, abonar la siembra generosa que comenzó en esa fecha inmortal. Pero abonarla con entusiasmo creciente, con todo el espíritu, sin vacilaciones, sin descanso. El mejor modo de hacerlo está en la unidad de todos nosotros, en la vigilancia de todos nosotros, dispuestos mañana, como lo hemos estado hoy, a correr todos los riesgos en defensa de la democracia dominicana y del honor nacional.

Ante el pueblo dominicano, ante sus dignos representantes que aquí encarnan el Honorable Congreso Nacional, renuncio como Presidente Constitucional de la República. Dios quiera y el pueblo pueda lograrlo, que esta sea la última vez en nuestra historia que un Gobierno legítimo tenga que abandonar el poder bajo la presión de fuerzas nacionales o extranjeras. Yo tengo fe en que así será.

Finalmente, invito al pueblo aquí reunido a hacer el siguiente juramento:

En nombre de los ideales de los Trinitarios y restauradores que forjaron la República Dominicana.

Inspirados en el sacrificio generoso de nuestros hermanos civiles y militares caídos en la lucha constitucionalista.

Interpretando los sentimientos del pueblo dominicano.

Juramos luchar por la retirada de las tropas extranjeras que se encuentran en el territorio de nuestro país.

Juramos luchar por la vigencia de las libertades democráticas y los derechos humanos y no permitir intento alguno para restablecer la tiranía.

Juramos luchar por la unión de todos los sectores patrióticos para hacer a nuestra nación plenamente libre, plenamente soberana, plenamente democrática.

Francisco Caamaño